Desde 1999 el aroma más icónico de Dior ha sido un emblema para la casa francesa. La feminidad ante todo, y sus filmes publicitarios han conquistado el corazón de las mujeres. Una Charlize Theron, de belleza hipnótica se desprende de sus accesorios e incluso de su vestido. Dior fue contra la corriente en una diversidad de la moda donde el exceso es todo. Al contrario la simpleza es lo que la firma buscaba.
En 2014, la actriz regresa en un nuevo filme dirigido de nuevo por Jean-Baptiste Mondino. Un recorrido sensual sobre Versalles con un nuevo vestido de esencia Haute Couture, un velo en representación de oro líquido cae de un duomo. En escala de la seda flotante el desprendimiento de sus perlas es de nuevo parte protagónica. “The only way out, is up
”, el pasado es hermoso pero no es un lugar para vivir, Dior apuesta por el futuro. Dejando un sentimiento de esperanza, y deseo de que todo…. es posible.
Vogue
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